Los valores especulativos en bolsa son los más adecuados para las operaciones de los traders. Pueden generar importantes beneficios en sus operaciones, incluso en el mismo día. Aportan unas fuertes oscilaciones en sus precios, y por encima de las ofrecen otros valores más tradicionales. No son valores muy líquidos, ya que los títulos que se negocian en los mercados bursátiles son muy pocos. Pero con un riesgo que los hacen adecuados solamente a los intereses de los inversores más agresivos.
Estos valores están representados por pequeñas empresas que cotizan en los índices secundarios, que basan su estrategia empresarial en las expectativas que crean sus modelos de negocio, generalmente con un nivel de endeudamiento muy elevado. De ahí que la cotización de sus precios se desarrolle con fluctuaciones muy bruscas, en donde un día suben un 20% y el otro se dejan un 30%. No hay una estrategia bien definida para operar con este grupo bursátil.
Son muy pleigrosos para tomar posiciones en ellos, ya que si bien pueden generar muchas plusvalías a sus accionistas, los riesgos son enormes. Incluso con la posibilidad que quiebren sus empresas, tal y como se ha podido constatar durante los últimos años, con casos del todo conocidos (Terra, La Seda de Barcelona, Sniace…).
Necesitan de un trato inversor diferente al de otros grupos de compañías cotizadas en la renta variable, y que solamente los ahorradores más agresivos pueden darles, sin que el éxito esté garantizado en ningún caso.
Desde luego que no son aptas para los inversores que se dirigen al medio y largo plazo, sino que requieren, por el contrario, de periodos de permanencia muy cortos, incluso en el mismo día. Asimismo, no están indicados para aportaciones muy cuantiosas, ni mucho menos, sino que deberán representar una parte mínimo del capital destinado a la inversión. A riesgo que lo podamos comprometer con unas operaciones bursátiles poco razonables para los perfiles moderados. No obstante, siempre están ahí estos valores, y es una posibilidad a la que pueden acudir los ahorradores con ganas de ser millonarios en pocos días.