Planes de pensión, con un colchón de seguridad

ahorroEn este caso, podemos elegir entre un una mayor tipología de productos financieros para los nuevos ahorros, ya que no requeriremos de disponibilidad inmediata y podremos asumir más riesgos. Y entre estos productos, no podían faltar los planes de pensión. Que a su tratamiento fiscal aporta una serie de ventajas que es necesario que valoren los usuarios.

Los planes de pensión o planes de ahorro, en caso de querer hacer una previsión para el futuro es uno de los productos más adecuados en estos momentos por sus especiales características. No nos permite retirar el dinero hasta la jubilación (o en el caso del plan de ahorro, hasta la fecha que hayamos marcado previamente).

Y todo ello, a menos que concurra alguna situación excepcional que pueda ocurrir. A cambio, nos ofrecen una mayor rentabilidad con respecto a otra serie de productos similares. No en vano, su rentabilidad oscila entre unos márgenes que van desde el 3% al 8%, en función del plan elegido y también de la situación en los mercados financieros, que puede varar – en uno u otro sentido – el interés que obtengamos por los planes suscritos.

Estos mismos efectos pueden conseguirse a través de los fondos de inversión, pero con una serie de diferencias muy claras. Para empezar, estos productos están pensados para que los pequeños ahorradores puedan acceder a carteras diversificadas que de otra forma no podrían. La diversificación disminuye el riesgo sin comprometer la rentabilidad.

Y través de los fondos de inversión podrá constituirse una bolsa de ahorro para los tiempos de la jubilación. No en vano, hay mucha diferencia en la rentabilidad que dan los distintos fondos de inversión y hay que tener en cuenta que se está asumiendo el riesgo de perder el dinero invertido en el caso de optar por un fondo no garantizado.

Para evitar estas desagradables situaciones, habrá que compararlos antes de invertir en ellos. Aunque son deseables de contratarlos a largos plazos, y de ahí la el destino que puede hacerse para emplearlos cuando lleguen el momento de la jubilación.